navasDeTolosa - senadocultural

Francisco de PAULA VAN HALEN (c. 1810 - 1887)
1864. Óleo sobre lienzo, 200 * 282 cm.
Obra depositada por el MUSEO NACIONAL DEL PRADO en el Senado
La pintura ofrece una visión panorámica del escenario de la batalla, que trata de recoger la grandiosidad y el número de participantes que se describen en los libros de historia, con las crestas de Sierra Morena al fondo, tan imaginarias como los personajes. En concreto, parece distinguirse a Diego López de Haro y las órdenes militares a la izquierda; al rey de Aragón, un poco delante suyo; y las enseñas de Navarra a la derecha, en segundo término, y las de Castilla en el centro, al fondo; en último término, a la derecha, se reconoce la tienda de Miramamolín que, parapeteada por 10.000 negros encadenados, está a punto de ser tomada por Alvar Núñez de Lara, que tremola el pendón de Castilla.
Se trata de una obra curiosa dentro del género porque presenta una visión de conjunto, que abarca todo el campo de batalla, como si se tratara de un gran paisaje con figuras, frente a la habitual preferencia de los pintores de asunto por presentar caracteres y tipos humanos. Es infrecuente, en efecto, dentro de la pintura de historia del siglo XIX, la utilización de este esquema compositivo, más propio de otras épocas, lo que ha de atribuirse a la eventual dedicación del pintor al paisaje y a las vistas de monumentos. Esa minuciosidad descriptiva explica el abundantísimo número de pequeños personajes, cuidadosamente dibujados, aunque un tanto torpes de actitudes y con atuendo un tanto legendario, que, no obstante, producen un efecto pintoresco en su conjunto. Estilísticamente es una obra tardía para la fecha en la que se dió a conocer, y responde, más bien, a principios genuinamente románticos, en todo caso anticuados pasada la mitad del siglo.
Desde un punto de vista simbólico, el pasaje de la batalla de las Navas de Tolosa es uno de los que más importancia tuvo, dentro de la historiografía española de carácter más imperialista, para ilustrar el sentido preclaro de la unidad nacional durante la Edad Media, al concitar la voluntad de las coronas de Castilla, Navarra y Aragón en una empresa común y victoriosa. Varios cuadros de historia se inspiraron en este tema a lo largo de la centuria. El propio Van Halen había realizado, hacia 1846, otra Batalla de las Navas de Tolosa, dentro de una serie de temas históricos españoles. (Extracto del texto de Carlos Reyero Hermosilla, dentro del libro "El Arte en el Senado", editado por el Senado, Madrid, 1999, págs. 310 y 312).