Maestre de campo de la infantería española

ANÓNIMO. Escuela italiana

Siglo XVII. Óleo sobre lienzo, 253 * 109 cm.

Aunque en la serie de Maestres de campo no suele ser frecuente, sin embargo, en gran parte de los retratos de carácter militar realizados en los siglos XVI y XVII los protagonistas suelen aparecer revestidos con armaduras. El retratado viste armadura, negra pavonada, con el recubrimiento de los brazos integrado por láminas imbricadas. Las armaduras hechas de láminas de acero imbricadas recibían el nombre de lóriga o lorigón si tiene mangas hasta el codo. Lleva en su mano derecha una bengala, uno de los elementos más representativos de rango y poder dentro del lenguaje militar, ya que su uso estaba reservado a los puestos más altos de la cúpula de mando dentro de los ejércitos. Se trata de una especie de bastón corto y cilíndrico, de madera lisa, ya usado por los cónsules romanos. Su origen quizá se encuentre en el escítalo lacedemonio, trozo cilíndrico de madera donde los generales espartanos enrollaban los documentos que recibían de los magistrados para poder leerlos. Además de ser un distintivo de mando militar, la bengala, al ser hueca, fue también utilizada para guardar en su interior los documentos acreditativos del rango o de la misión encomendada a su portador, que le servían para identificarse ante la tropa y transmitir la voluntad y las decisiones reales, tomadas generalmente en lugares muy alejados de donde se producían las contiendas. (Extracto del texto de Trinidad de Antonio, dentro del libro "El Arte en el Senado", editado por el Senado, Madrid, 1999, págs. 74 y 76).